lunes, 3 de diciembre de 2012

Lentes antirreflejantes

Primera imagen: visión con lentes sin antirreflejante.
Segunda imagen: visión con lentes con antirreflejante.


Hoy me gustaría hablaros del tratamiento antirreflejante de los cristales, de sus ventajas y la diferencia de calidad de visión entre las lentes antirreflejantes y las que no llevan este tratamiento.
El tratamiento antirreflejante de una lente disminuye al máximo los reflejos, elimina la visión con dobles imágenes, evitan deslumbramientos e incrementan el contraste.
Con las lentes antirreflejantes se gana en comodidad, se disfruta de una visión más relajada y más limpia en todas las situaciones, disminuyendo así la fatiga ocular. Conlleva una mejor visión, más nítida y que evita los desagradables reflejos que pueden producir los destellos, como por ejemplo en la conducción nocturna o frente al ordenador, consigue dejar pasar hasta un 16% más de luz que las lentes convencionales, con lo que se consigue un incremento de la agudeza visual.
Hoy en día pasamos muchas horas delante del ordenador y es vital cuidar nuestros ojos (ya que de momento no hay de repuesto), con el antirreflenjante el ojo estará mucho más descansado que con las lentes ordinarias, se disminuye la fatiga de los mismos y evita que todos los destellos que genera la pantalla del ordenador, sean disipados, y nuestra visión sea mucho más nítida.
Además los nuevos antirreflejantes conllevan tratamientos para evitar la suciedad y repeler la humedad, e incluso los hay con factor de protección solar para los ojos (de éstos últimos os hablaré más adelante).
En definitiva, con el antirreflejante es como si no tuvieras cristales delante de los ojos, y sin él verás los reflejos que producen las fuentes de luz artificial en los cristales (focos de luz, pantalla de ordenador, fluorescentes...).
Yo suelo utilizar esta analogía cuando le explico a los clientes en qué consiste este tratamiento:
Si estás en casa (con las luces encendidas) y miras a la calle con la ventana cerrada, verás en el cristal reflejadas todas las luces que tienes encendidas, esa sería la visión con una lente sin antirreflejante. Si abres la ventana todos los reflejos desaparecen y tienes más calidad de visión, tienes una visión mucho más limpia, esa sería la visión con una lente con antirreflejante.

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